Cuanto más clara sea la piel (fototipos más bajos), más fácilmente se quemará con la radiación solar. Sin embargo, todos los tipos de piel, incluso las pieles más oscuras, sufren los daños imperceptibles de la radiación solar. La fotoprotección es imprescindible en cualquier tipo de piel y fototipo.
Se recomienda reaplicar el protector solar cada 2 horas y en cantidad suficiente (2mg/cm2 o lo que sería equivalente a una cucharadita de café) ya que si la cantidad aplicada es insuficiente el nivel de protección se ve reducido. Además, es especialmente importante reaplicar el producto tras el baño, tras secarse con la toalla, o en caso de sudoración.
Es importante fotoprotegerse durante todas las estaciones del año y tener especial cuidado cuando realicemos actividades al aire libre y cuando la radiación solar es más intensa, como en la playa o en la alta montaña.
Lo primero que debes de tener en cuenta a la hora de elegir el protector solar, es que este proteja la piel de los daños causados por las principales radiaciones: UVA, UVB, la luz visible (HEV) y la radiación infrarroja (HEV). El daño solar, no se debe exclusivamente a la radiación UVA y UVB, la radiación visible e infrarroja tienen un papel muy importante. Por lo tanto, busca fotoprotectores que ofrezcan una protección de amplio espectro.
Otros factores que se deben de tener en cuenta es el tipo de piel y la zona de aplicación. El protector solar se debe de utilizar diariamente y reaplicarlo en varias ocasiones, por este motivo debe de adecuarse a tu tipo de piel y sentirse cómodo en el rostro. Desde texturas más ligeras para pieles grasas, a texturas más ricas para pieles secas, es cuestión de encontrar uno que se adecue a tus necesidades.
No se debe olvidar las zonas más sensibles del rostro, como los labios y el contorno de los ojos.
Busca el protector solar de mesoprotech® que se adapte a tu tipo de piel.
Hasta el 90% de los rayos UV atraviesan las nubes. Los días nublados y con viento pueden dar una percepción errónea sobre la intensidad de la radiación solar pero los efectos de la radiación son los mismos.
No es recomendable utilizar un protector solar pasado el tiempo tras la abertura del envase, es decir, tras los meses indicados en el PAO. El PAO (Period After Opening), es un icono que se encuentra en el envase que indica los meses que el producto está en condiciones óptimas desde su apertura. Una vez pasado este tiempo, la eficacia protectora se ve disminuida.
Los labios son especialmente sensibles y vulnerables a los factores externos. Están recubiertos por un único epitelio, están muy vascularizados y no tienen ni melanocitos, ni glándulas sebáceas, por lo que no tienen un automecanismo de protección y es especialmente importante protegerlos del sol.
Dentro de la gama mesoprotech® puedes encontrar mesoprotech® sun protective repairing stick. También lo puedes utilizar en el contorno de los ojos, cicatrices y manchas