¿Conoces los daños que genera la sobreexposición a la luz azul en la piel?
Tenemos muy interiorizados los daños que los rayos UVA y UVB producen en nuestra piel, pero los rayos ultravioletas no son los únicos a los que debemos prestar atención. Hoy también es importante tomar conciencia de qué manera debemos cuidarnos de la radiación de la luz azul, proveniente de la exposición:
- A los rayos solares
- A las pantallas de los móviles, las tablets o los ordenadores, dispositivos que están cada vez más presentes en nuestro día a día.
La sobreexposición a la luz azul acelera el envejecimiento cutáneo como cualquier otra radiación. Uno de los daños que provoca en la piel es la oxidación, y la aceleración de este estrés oxidativo es uno de los principales responsables del envejecimiento de la piel.
La luz azul también genera sequedad en la piel, ya que induce a una disminución de las acuaporinas, que son las moléculas responsables de mantener el nivel de hidratación cutánea. Además, activa las metaloproteinasas que aceleran la destrucción del colágeno, causando signos de flacidez y aparición de arrugas.
Por último, estar en contacto con la luz azul puede desencadenar la formación de manchas gracias a una molécula llamada Opsina 3, que participa a lo largo de todo este proceso.
Existen productos que actúan como escudo tecnológico, protegiéndonos de estos daños, ya que cuentan con sustancias activas que llevan a cabo una acción antioxidante. El concentrado protector celular antioxidante aox ferulic actúa como un protector biológico frente a la oxidación producida por fuentes de luz azul. Además, potencia la síntesis de colágeno y protege a las células responsables de su producción promoviendo la elasticidad y turgencia de la piel.
También es importante que busquemos un protector solar que no solo nos proteja de los rayos UVA y UVA, sino también de la luz visible y, principalmente, de la luz azul. mesoprotech es la innovadora gama que ofrece la tecnología fotoprotectora más avanzada y completa, al proteger contra los efectos nocivos producidos por las radiaciones UVB y UVA, así como contra la radiación infrarroja (IR) y la luz visible (HEV).
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